Ritual para la limpieza de mente y cuerpo

Lo que tiene que ser será, a su tiempo y en su momento, solo confía y espera con paciencia.

Necesitarás:

• 3 cucharadas de flores secas de lavanda
• Un manojo de manzanilla (limpio)
• 3 cucharadas de flores secas de toronjil morado
• Una cucharada de valeriana seca
• 10 gotas de aceite esencial de gardenia
• 3 litros de agua
• Difusor de aceite esencial
• Vela de té (para el difusor)
• Vela blanca o morada (preferiblemente chica o de té).

Pon el agua en una olla a hervir. Apaga y quita de la estufa. Agrega todas las hierbas: la lavanda, la manzanilla, el toronjil y la valeriana. Tapa nuevamente y deja reposar por 10 minutos.

Si tienes bañera puedes agregar esta infusión para sumergirte. De lo contrario agrega la infusión a una cubeta de 19 litros y llena a tope con agua del grifo. En ambos casos se dejan las hierbas.

Antes de meterte a bañar enciende la vela y el difusor, agregando las 10 gotas del aceite esencial de gardenia, todo esto para crear un ambiente de relajación.

Recomiendo también poner algún mantra como música de fondo, alguna melodía de más de 500 Hz, música de cuencos de cuarzo o tibetanos, o sonidos de la naturaleza para mejorar tu experiencia.

Limpia desde adentro

Báñate como de costumbre. Al terminar vas a tomar en primer lugar las hierbas y las vas a tallar por todo tu cuerpo, desde la cabeza hasta los pies, de arriba hacia abajo sin regresarte.

En voz alta vas a pedirle a las hierbitas que quiten de ti toda ansiedad, desasosiego e intranquilidad que te estén perturbando en ese momento.

Cuando hayas terminado las vas a pisar con el pie derecho (descalza) fuerte.

Después vas a tomar el agua de la cubeta y de a poco la vas a ir echando sobre tu cuerpo, del cuello para abajo, aquí puedes hacer un decreto para transmutación (puede ser una petición al arcángel Zadkiel).

Puedes solo visualizar un rayo de color violeta que baja desde el centro del universo hasta tu cabeza, te atraviesa y sale por las plantas de tus pies llevándose con él todo aquello que te pone ansiosa.

Al terminar este aclaramiento con la infusión lo envías todo (la visualización) al centro de la tierra para que Gaia se encargue de transformarlo.

Al final no seques su cuerpo, solo envuélvelo con la toalla y deja que se absorba la infusión. Ponte pijamas blancas o claras y vete a dormir.

La vela se deja consumir hasta terminar. El difusor se puede apagar o llevar a tu recámara.

Este baño lo puedes hacer cualquier día de la semana, sin importar la fase lunar. El horario es en la noche antes de ir a dormir.