
Confía en la magia de Dumbar el Curandero.
Frase del día: El cambio sucede cuando ante el mismo estímulo decidimos actuar diferente.
El dinero tiene una energía maravillosa, por eso es importante respetar y valorar cada billete y moneda que tocan nuestras manos.
ORDENA tus billetes de menor a mayor porque así, inconscientemente, estamos incrementado su llegada.
Nunca los arrugues y desecha cualquier papelito, tiques de compra o basura de tu cartera que, de preferencia, debe de ser de color rojo, amarillo, dorado, verde o naranja.
Para los hombres, el color de su billetera puede ser marrón. Estos colores sintonizan con la prosperidad y con el dinero.
Procura que tu billetera siempre esté en buen estado; si ya está muy deteriorada mejor desecharla y comprar una nueva y bonita.
Lo anterior, porque te lo mereces, porque tu dinero lo debes tratar con amor, respeto y gratitud todo el tiempo; cuando recibes y cuando das.
Algo muy importante es dejar de mirar siempre si algo es muy “caro” o “barato”… Es mucho más importante LA INTENCIÓN con la que intercambias el dinero.
Si pagas tu artículo o servicio dando gracias y sintiendo que ese dinero que pagas, de la misma manera en que lo das, el “Universo” te lo regresará multiplicado y potenciado al infinito (77 veces 7).
No importa si es muy “caro”, SIEMPRE TE VA A REGRESAR, ¡CREELO!
Cuando eliminamos de nuestras emociones la idea de que algo es “CARO” o “BARATO”, inmediatamente empezamos a sintonizar y conectar con la energía del dinero.
Al pagar algo, un producto o servicio, NUNCA pagues con tristeza, con miedo a la carencia, porque eso es lo que más vas a atraer.
Al contrario, paga SIEMPRE con gusto, con amor, con agradecimiento, porque puedes pagarlo y, en el momento exacto en que estés intercambiando tu dinero.
MANIFIESTA con certeza Divina, en voz baja o mentalmente lo siguiente:
“Todo el dinero que sale de mí, vuelve a mí en perfecta y magnífica multiplicación, se te multiplica a ti infinitamente, de todo corazón y también a mí.
El dinero se nos multiplica a los dos y a todos por igual, infinitamente, en todo lo que más nos hace felices. ¡Hecho está!”
Hazlo con fe, ¡SIEMPRE funciona!