Mata el antojo con unas papas tabasqueñas de don Armando

TABASCO. –Las papitas son uno de los antojos más recurrentes cuando te ruge la tripa y si son de las naturales haces unas mezclas bien locas, que incluye su salsita, así mero las vende Armando Leaños.

Este don hace artesanalmente unas papas que te quitarán el antojo y querrás compartir con la familia, pues los productos de don Armando los hace él mero.

El zacatecano ha dedicado poco más de 40 años de su vida a la noble labor de hacer y vender papas fritas naturales en Tabasco, donde es muy conocido por su delicioso sazón.

Aunque pareciera sencillo, este oficio tiene sus detalles que deben ser cuidados para ofrecer a los clientes un producto de gran calidad, que una vez que lo pruebe no pueda comer solo una.

“Para hacer las bolsitas se requiere una papa especial, no cualquier papita”, señala don Armando quien hace su compra en el Agropecuario de Aguascalientes, donde selecciona las papas más grandes para sus paisanos.

El secreto del comerciante es que la papa que compra es de almidón y no de agua, lo cual hace que el tubérculo quede doradito cuando don Armando se pone a freírlos y le dé ese crujir delicioso.

El sabor no para

Don Armando es uno de los zacatecanos trabajadores, pues por las tardes se pone a freír las papas y por la tarde las vende en el Parián de Tabasco, justo frente a la presidencia municipal.

Nadie que pase por ahí se puede resistir a ver y tentarse de una bolsa de papitas que el comerciante pone en un carrito, donde una vitrina transparente hace que a más de uno se le haga agua la boca.

Para don Armando la mejor venta es en diciembre cuando es la feria, pero todo el año, no falta quien llegue por unas papitas, a las que les pone su limón, su sal y su salsita brava… valentina pues…

La imaginación es el límite

Don Armando no se cierra a la venta y se pone de modo con la banda, pues puedes comprar desde 10 pesos hasta kilos de papa para llevar a casa o para invitar en una reunión.

Ya estando en el chante las combinaciones no paran con las papitas, pues puedes servirlas con cueritos de puerco curtidos, que son un verdadero manjar y hará que te chupes los dedos.

En tu visita a Tabasco no te vayas sin comerte unas ricas papitas con don Armando, aunque no tiene un día fijo de descanso, generalmente lo pueden encontrar en las mañanas frente a las combis que van a Jalpa.