Cumple San Juan el milagrito a Irma

Irma y su familia agradecen los favores recibidos. Fotos: David Castañeda.
Irma y su familia agradecen los favores recibidos. Fotos: David Castañeda.

Sanó a su hijo de los problemas de salud que enfrentaba.

ZACATECAS. – Una vida llena de milagros y fe es la de Irma Murillo y su familia, quienes a pesar de ser de la colonia Tres Cruces les llegó la devoción por el santo del Barrio La Pinta.

Los primeros en traer Las Morismas en las venas son los tíos y primos de Irma, quienes año tras año iban a las festividades, donde a la zacatecana le llamaba la atención la fe y todo el entusiasmo que le ponían.

Con eso presente, Irma se enfrentó a su primera situación complicada, hace 6 años su primer hijo tenía una enfermedad que ni los médicos daban, simplemente estaba malito; pero no sabían de qué.

Por ello, recordó la fe del Barrio La Pinta, se acercó a San Juan Bautista y pidió por la salud del pequeño Marcus, quien al poco tiempo recuperó su vitalidad como si nada hubiera pasado.

Junto a su hermana participaba todos los años en las tradicionales Morismas.

Como toda madre agradecida,en el primer año que comenzó a participar en Las Morismas , Irma lo hizo descalza para agradecer el favor concedido.

Los milagros en su familia gracias a San Juan Bautista no quedaron ahí, pues su hermana sufrió un terrible accidente, en el cual por poco y pierde un ojo.

Los médicos decían que la zacatecana quedaría ciega; pero, la familia de Irma, de 29 años, no se rindió y se unieron en oración hacia el santo, quien realizó el milagro.

La hermana de Irma se recuperó en poco tiempo y pudo sanar su ojo, sin perder la vista o el órgano.

Asimismo, la mujer de 29 años comentó que sus tíos y primos tuvieron un accidente en uno de los festejos de Bracho; aunque, el santo jamás los dejó de su mano y ellos se encuentran bien.

Su hijo Markus se recuperó totalmente de sus malestares.

Hoy 29 de agosto celebramos a San Juan Bautista, a quien se le honra en Zacatecas con Las Morismas, que este año fueron suspendidas por la pandemia del coronavirus.

Sin embargo, la familia de José y de Irma no olvidan a quien los sostiene en su mano y a quien le deben hasta la vida, por ello es momento de recordar y unirse en oración.

Saquen el rosario pecadores, que es tiempo de reflexión, pues dicen que uno jamás será protagonista de un milagro sino se cree en ellos.

De esta manera, estas historias zacatecanas nos dicen que hay que continuar esta grande y mágica tradición, pues los tiempos son difíciles; pero, la abuela decía que la fe hace milagros.