A toda máquina, gira el taller de don Hilario

Hilario nunca imaginó que por ir a un curso terminaría con un tremendo negocio. / Fotos: David Castañeda.
Hilario nunca imaginó que por ir a un curso terminaría con un tremendo negocio. / Fotos: David Castañeda.

Don Hilario repara, y les da mantenimiento a camiones y todo empezó cuando de niño asistió a un taller de soldadura y torno.

ZACATECAS.- Así como necesitamos doctores, se necesitan buenos mecánicos  y que le sepan mover a la maquinaria pesada, y aquí en Zacatecas uno de los pocos talleres que se dedican a estos jales es el de don Hilario.

Hilario de León García es un hombre muy trabajador y emprendedor que se hizo de su negocio gracias al amor al trabajo, y al apoyo de su familia, y lo ha mantenido en pie contra viento y marea.

Este tipo de maquinaria pesada no cualquiera la arregla.

Orgullosamente, Hilario es de El Orito, y empezó de muy abajo; él aprendió el oficio desde que era niño, ahí nos platicó que, diariamente, salía de la primaria pa’ unos cursos de soldadura y torno que daban en el Seguro.

Y nomás acabó el cursito, así bien pequeño se puso a emprender un changarro pa’ sacar dinero y con muchas ganas de trabajar, comenzó su propio taller fabricando puertas y ventanas, pero poco a poco le fueron pidiendo otras chambas.

Se aprendió todos los secretos para que jalen al 100.

Durante años nomás se dedicó a soldar pero luego le fueron cayendo algunos trabajitos pa’ hacer mantenimiento de camiones y servicio.

Como sí entregaba buenos trabajos, al poco rato, varias empresas con flotilla de camiones lo comenzaron a buscar. Por eso le dio la vuelta a su changarro pa’ dedicarse a lo que ahora hace en su taller.

El siempre está al pendiente.

Un trabajo pa’ toda la familia

Su familia le ayudó pa’ que todo le fuera saliendo bien, y sin duda fue muy importante para que pudiera crecer el taller de don Hilario, pues ahí sus hijos se metieron a la talacha.

Ahorita, los dos hijos de don Hilario trabajan en el taller, esto pa’ cubrir el lugar de su papá, quien se retiró hace un par de días por sus salud y su edad, pero, eso sí, siempre está al pendiente de ellos.

Todos los que trabajan con Hilario son parte de una familia que siempre se están ayudando.

Gracias a tanta unidad y esfuerzo, en el changarro de don Hilario se dedican a reparar, fabricar y modificar maquinaria pesado, por ejemplo elaboración de pipas, cajas de volteo y reparación de sistemas hidráulicos y suspensión de camiones.

Según nos cuentan, en esta empresa, la raza que trabaja ahí se echa la mano y se trata como parte de la familia, ahí, a los trabajadores se les respeta y trata bien, y ellos también responden de igual manera.

También un aporte muy importante del negocio es la hija de don Hilario, quien se dedica a la venta de refacciones, ella es buena pa’ mover la mercancía y aporta en este negocio que ya es una legado de familia.

Sus enseñanzas y esfuerzo permanecerán, pues sus hijos ya le entraron al negocio.



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