Un museo lleno de rostros, la mayor colección de máscaras en el mundo

El museo de las máscaras de Rafael Coronel cuenta con 11 mil ejemplares.

ZACATECAS.-  En nuestra bella ciudad hay muchas atracciones para los turistas y para los locales, una que siempre vale la pena ver, por lo vasta que es, sin duda, es el museo de las máscaras de Rafael Coronel.

Y es que no solo es una de las colecciones más grandes de la región o de México, es la colección de máscaras más grande y variada que hay en el mundo, pues cuenta con unos 11 mil ejemplares.

Pero solo está en exposición una quinta parte de las máscaras que se tienen albergadas.

Esta exhibición empezó en el 1990, y desde entonces está abierta al público en el centro de Zacatecas.

En total este museo resguarda más de 16 mil piezas de todo tipo.

La colección de un gran autor

A través de este recorrido de máscaras uno puede conocer una probadita de distintas culturas que usan estas máscaras, como símbolos presentes en su danza y sus fiestas populares.

Todas estas mascaras nos hablan de un valor histórico, de muchas culturas, religiones y cuyas formas y colores, texturas y materiales, nos conjuntan un panorama muy amplio de civilizaciones a través del tiempo.

Hay máscaras de demonios, ángeles, reyes y animales.

En este sitio hay máscaras de todo tipo de materiales, entre ellas se puede ver máscaras de madera, piel de animal e incluso cola de caballo.

Todas estas máscaras, pertenecían al artista plástico Rafael Coronel, quien en el año de 1990 las donó. Este artista  no solo es conocido por haber dado todas estas máscaras, sino que él es considerado como uno de los mayores representantes del expresionismo mexicano.

Las máscaras comenzaron a exhibirse en 1990.

Un pintor que no solo amaba coleccionar mascaras sino que a menudo en sus pinturas presentaba personajes usando máscaras, en medio de una danza, en hechizo o en una escena sacada de un sueño.

Entre otras cosas, en el museo también se pueden encontrar ollas prehispánicas, títeres de la compañía Rosete Aranda con más de 100 años de antigüedad, entre otras cosas están las actas del nombramiento de la ciudad en 1597.

Un espacio histórico, lleno de rostros y culturas

Si bien las máscaras son una de las razones principales para ir a visitar el sitio. En este museo se pueden ver todas estas cosas que se han mencionado y que tienen un amplio valor museográfico.

Pues en este recito (un ex templo que, por sí mismo es una construcción arquitectónica valiosa) cuenta con una importante colección de arte popular mexicano. En total este museo resguarda un acervo de más de 16 mil piezas de todo tipo.

El espacio es una gran construcción rodeada de un amplio y verde jardín. Aún a día de hoy, visto por afuera parece una iglesia, pero al entrar encontrará este bello museo, amplio y laberintico.

Las máscaras son símbolos presentes en danza y sus fiestas populares.

Así que, además de  máscaras, uno podrá encontrar dibujos, ollas, títeres, exvotos, cuadros, artesanías y demás.

Por el lado de las instalaciones, podemos  ver que este museo, en un pasado lejano era un templo que se empezó a construir en el siglo 16 y que se concluyó en el siglo 18.

Desde este lugar que ahora alberga las máscaras, en tiempos lejanos, fue el sitio donde empezaron las misiones que colonizaron y evangelizaron el norte de México.

Para que el lugar funcionara como un museo pasaron unos cuatro años, más o menos, pues, en 1987, se iniciaron los trabajos de restauración del inmueble,  para abrirlo ya en 1990.

Tardaron dos siglos en construir el Templo.

A día de hoy, el  Museo Rafael Coronel recibe año con año a cerca de 48 mil visitantes, debido a la pandemia este lugar se tuvo que cerrar por más de un año y al día de hoy está abierto y a la espera de recibir visitantes.

Así que si quiere toparse con máscaras de demonios, ángeles, reyes, animales y demás, podrá encontrarse con todas esas caras que le causarán pavor, o lo contagiarán del colorido de esas viejas fiestas.

Si gusta vivir la experiencia, el pase está disponible, de martes a jueves, podrá dar un paseo por este recorrido de 10 de la mañana a 5 de la tarde.

Las máscaras que se exhiben sólo son una quinta parte de lo que el museo alberga.