La neblina realza los paisajes zacatecanos 

El centro histórico se llena de una densa neblina durante la temporada de invierno. | Fotos: Carlos Montoya.
El centro histórico se llena de una densa neblina durante la temporada de invierno. | Fotos: Carlos Montoya.

La niebla embellece la capital zacatecana.

ZACATECAS.- Dicen que cuando uno pierde el camino entre la niebla, casi siempre termina en un lugar hermoso y más si se trata de la ciudad de cantera rosa y corazón de plata.

Todo zacatecano sabe que cuando llega la temporada de invierno, el clima crea paisajes sorprendentes dignos de una postal.

Desde temprano se puede observar la neblina en los cerros.

Pues el clima en esta época del año origina mantos de neblina principalmente en las partes altas que rodean la ciudad.

Estos paisajes pareciesen como si estuvieran sacados de un cuento de hadas por lo que no se los puede perder por nada del mundo.

Pareciese como si el camino se perdiera entre los montes.

Lugares a visitar

Para el caso de la capital, el trabajo de la niebla es embellecer aún más las bellezas existentes y eso queda de manifiesto en lugares como el Cerro de la Virgen que, cuando la densa neblina lo cubre cual velo de novia el paisaje es hermoso.

Si usted se da una vuelta por el camino empedrado verá un deleite para sus pupilas ya que parece que la cima no tiene un inicio ni un final.

El invierno es muy común ver la neblina sobre la ciudad.

Otro de los sitios que resalta por su belleza cuando la espesa niebla baja es el Ecoparque Centenario.

Éste combinado con su basta vegetación y por la presa de Infante le da un toque único digno de ser visitado.

Por su parte, el cerro de la Bufa también es de los lugares que en invierno se cubre de niebla y luce espectacular cuando el sol empieza a asomarse.

En la capital, estos paisajes son tomados para postales.

La capital en invierno

El Centro Histórico no podía quedarse atrás si de ofrecer espectaculares postales con neblina se trata.

Pues la Catedral y sus torres así como sus avenidas principales como lo son la Hidalgo y la Juárez donde se ubica la iglesia del Sagrado Corazón lucen imponentes bajo esta condición climática.

Los parques y áreas verdes son las que glorifican con la neblina.

Así que ya sabe, deje el tiempo de despertarse un día temprano para que pueda apreciar las maravillas que le ofrece el suelo zacatecano.

Pronto verá que encontrarse a uno mismo en el camino, es como despertarse en un día de niebla.

Personas que salen desde temprano logran ver estos paisajes.