En el olvido el Mercado Roberto del Real Carranza; comerciantes piden apoyo

ZACATECAS.- El Mercado Roberto del Real Carranza, mejor conocido por la población zacatecana como el Mercado de la Fayuca, trabaja con aproximadamente 30 locales que abren diario, de 110 que tiene en total.

De acuerdo a comerciantes, el número de locatarios que abren sus negocios a diario se ha reducido con el paso de los años, pues este centro comercial con 38 años de vida, tuvo sus años de esplendor en que la mayoría estuvieron abiertos.

La gran cantidad de espacios cerrados, coincidieron comerciantes, genera que muchas personas no entren a realizar sus compras, ya que tienen la idea de que no existe variedad de productos y que incluso el mercado está en el olvido.

Pero esa no es la realidad, dijo José Froilán Casas Rodríguez, presidente del Mercado Roberto del Real Carranza, quien comentó que en los 30 locales abiertos, se ofrece frutas y verduras, tortillas, alimentos preparados, también hay carnicería, productos de abarrote, ropa, ferretería y artesanías.

Locales son utilizados como bodegas

La imagen de que es un mercado en abandono, comentó, se puede eliminar si la administración municipal da mayores facultades a la mesa directiva del lugar, para que “defina a quiénes sí y a quiénes no se les pueden rentar los locales”.

Con ello se busca que a quienes se les asignen los espacios abran a diario, para ofrecer más productos y atraer más clientela.

Lo anterior ya que muchos de los locales cerrados son utilizados como bodega por comerciantes que los días domingo se instalan en el Tianguis de la Fayuca, que se ubica afuera del mercado, o que tienen otros locales en el Centro Histórico.

“El mercado fue ejecutado para la venta no para ser bodegas” dijo y añadió que ya tienen un proyecto elaborado con esta propuesta que presentarán a la administración que en septiembre tome las riendas del Ayuntamiento de Zacatecas.

Referente a las condiciones en que se encuentra el espacio, comentó que en general son buenas, ya que los comerciantes han realizado gestiones para que se le dé mantenimiento a los baños o a la energía eléctrica, “aunque sí le falta una manita de gato”.

Se dificulta pagar la renta

Debido a que hay pocos locales abiertos, y que durante la pandemia las ventas disminuyeron, Casas Rodríguez dijo que se pidió tolerancia a la administración municipal para retrasarse en el pago de las rentas.

“A veces estas toda la semana y si vendes 100 pesos tienes una buena venta, otras semanas mejora un poquito, pero hay que comer, tienes otros compromisos primero”, comentó.

Bertha Trejo Ocampo, comerciante del lugar, dijo que la renta que se paga mensual es de 500 a mil pesos, dependiendo del giro del comercio.

Aún y cuando son económicas “tenemos que estirar lo poquito que ganamos al día para la renta, para la luz, para el agua, para comer”.