
Sigifredo Noriega Barceló, obispo de Zacatecas.
El obispo comentó que es importante analizar los derechos por los que se luchan.
ZACATECAS.- En la actualidad es complicado discernir entre el bien y el mal; la gente habla mucho de los derechos humanos, pero se analizan poco estos temas, compartió Sigifredo Noriega Barceló,
Durante su reflexión dominical, el obispo de Zacatecas, expresó la necesidad de analizar los derechos por los que se luchan.
“Saber si están bien, si son relativos o no, es difícil, pero tenemos que distinguirlo”, compartió.
En otro tema, invitó a los fieles a no juzgar el actuar de los demás, sino analizarse antes de hablar.
“No hay que hacer juicios anticipados, solo Dios puede juzgar; los hombres somos demasiados aventurados a la hora de hacer juicios”, dijo.
Así mismo, refirió que quién es juzgado por otro no debe tomarlo a pecho pues “una vida no se puede construir sobre una opinión”.
Aseveró que todas las personas tienen la posibilidad de cambiar, de ser mejores, pero solo Dios puede evaluarlo.
Noriega Barceló, ejemplificó con el tema de la pena de muerte para “las persona malas”, explicó que a los humanos es una solución; sin embargo, la lógica de Dios es distinta la de los humanos.
“Hay tiempo y oportunidad para cambiar, todos tenemos la oportunidad de la conversión”, compartió.
Al final, dependerá de los frutos que cada persona dé, que se defina si fue alguien bueno o malo.
El obispo, sugirió a los creyentes que pidieran tres cosas, ser personas fieles, el don del discernimiento y el del compromiso.
“Hay que pedir a Dios ser fieles, a pesar de la cizaña que hay en la vida; el don del discernimiento, no hay que tragarse todo, hay que preguntarse si está bien o mal, y tercero, hay que pedir saber comprometerse. La vida se resuelve entregándola, amando”.