En un mes, 732 muertes por asaltos en carretera, según Amesis

Foto: Cortesía
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Una modalidad delictiva que ha ganado terreno es el “jamming”. En esta práctica, los delincuentes bloquean las señales de rastreo.

El transporte de carga en México enfrenta una crisis sin precedentes. La Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada e Industria Satelital (Amesis), reportó que en 2023 se reportaron más de 7,800 asaltos en carretera. Un año negro para la industria.

Los datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) muestran que aproximadamente el 85.6% de estos asaltos en carretera implicaron un alto nivel de violencia. Perdiendo vidas de operadores y un impacto devastador en el sector. Esta tendencia preocupante ha llevado a un promedio estimado de 56 robos diarios, con los abarrotes como los productos más afectados.

Una modalidad delictiva que ha ganado terreno es el “jamming”. En esta práctica, los delincuentes utilizan dispositivos tecnológicos para bloquear las señales de rastreo, de este modo, dificultan la localización de las unidades y las mercancías robadas. Esta situación no solo pone en peligro la seguridad de los trabajadores y las mercancías, sino que también tiene un impacto económico significativo.

El aumento en los costos de transporte se traduce en un incremento en los precios de los productos para los consumidores finales. Ante esta crisis, las autoridades deben tomar medidas concretas y efectivas para abordar la amenaza que enfrenta el sector transportista en México.

La falta de acción podría tener repercusiones devastadoras no solo para los trabajadores y empresarios involucrados, sino también para la estabilidad económica del país en su conjunto. Se deben implementar estrategias eficaces para combatir esta ola de violencia y para mantener en funcionamiento la economía nacional.