En Nuevo León, niño pierde un dedo en accidente con un abanico

NUEVO LEÓN.- El dedo que un niño perdió en un accidente con un abanico metálico, se reimplantó en un hospital del IMSS.

Los cirujanos de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) Hospital de Traumatología y Ortopedia No. 21 de Monterrey, lograron hacer esta cirugía.

El pequeño podrá recuperar la movilidad en la mano izquierda casi por completo, el accidente ocurrió en la casa del niño, su dedo pulgar quedó atorado en una cortina, que después entró en contacto con el abanico.

Para que el niño recuperará su dedo, el doctor Miguel de la Parra Márquez tuvo que unir arterias, venas, tendones, huesos y nervios con suturas milimétricas.

Cirugía laboriosa y precisa

La operación fue más complicada de lo habitual, cada parte tuvo que ser reimplantada de manera individual.

“Otro factor de dificultad es que a menor edad, sus arterias y venas son más pequeñas y es más complejo repararlas, sobre todo unirlas sin que éstas se tapen”, aseguró el especialista.

Para poder llevar a cabo la supramicrocirugía se utilizó un microscopio al máximo aumento. Durante seis horas, el cirujano logró que el dedo que había estado dentro de una hielera se conservara.

“Cuando se amputa un dedo pulgar, la mano pierde al menos el 45 por ciento de la función, ya que éste es el soporte para gran cantidad de funciones como tomar un vaso de agua y abrochar el botón de una camisa, solo por mencionar algunas”, dijo el doctor.

“Mi peor miedo era que el niño fuera a perder su dedito, fueron para mí muchas horas de angustia, hasta que el médico salió del quirófano y me dio la buena noticia, me dieron ganas de abrazarlo, estaba muy agradecida por todo el trabajo y muy feliz al saber que había salido todo bien”, expresó Aurora Ibeth, madre del menor.

Lo que pudo ser una desgracia, tuvo un buen resultado, gracias a la rapidez con que se atendió y la habilidad del equipo médico que lo atendió.

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