Crimen organizado desplaza a pobladores de comunidades de la Sierra Tarahumara
Al menos 300 habitantes fueron desplazados de sus comunidades por miedo a narcotraficantes.
CHIHUAHUA.- En dos comunidades de la Sierra Tarahumara de Chihuahua evacuaron a sus habitantes, ya que sus vidas estaban amenazadas por las actividades del crimen organizado en la región.
A través de las redes sociales, los pobladores de La Norteña, del ejido El Largo Maderal, solicitaron ayuda de las autoridades.
Además, en el municipio de Guadalupe y Calvo aplicaron el “Plan Emergente de Apoyo para Inhibir las Agresiones a las Familias” en la comunidad para trasladar a más de 20 personas a un lugar seguro.
En los operativos participaron elementos de la Fiscalía General del Estado, con apoyo de la Secretaría de la Defensa Nacional.
Cabe destacar que la comunidad Rincón de Alisos forma parte del llamado Triángulo Dorado, donde convergen los estados de Sinaloa, Durango y Chihuahua, zona serrana sin caminos, con un bosque espeso en donde los narcotraficantes pueden ocultar sembradíos de marihuana y amapola.
En este caso, el día 30 de octubre se recibió una llamada de auxilio de los habitantes de dicha comunidad, en donde se reportó una irrupción de grupos armados y temían por su seguridad.
Personal de la Agencia Estatal de Investigación y la Fiscalía de Distrito Zona Sur, con la colaboración del Ejército Mexicano, se trasladaron a Rincón de Alisos, en donde se brindó apoyo consistente en acompañamiento y traslado a lugares seguros.
En los recorridos efectuados por las fuerzas del orden en la zona, detectaron y destruyeron cinco plantíos de marihuana con una superficie total de 11 mil 218.6 metros cuadrados y 42 mil 822 plantas destruidas.
En el caso del municipio de Madera, la denuncia pública la hicieron luego que las autoridades de la Sedena, detuvieron al líder criminal de la región, conocido como “El Jaguar”, cabecilla principal del Cártel de Sinaloa o El Nuevo Cártel del Tigre.
Entre ambas comunidades, han sido al menos 300 habitantes que emigraron de sus poblados, dejando atrás sus viviendas, parcelas, ganado y pertenencias, a fin de salvar sus vidas.
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