
¿Cuándo comenzará la cuarta ola de calor? | Foto: Cortesía.
El 2024 no solo marcó un récord histórico de calor; también dejó un claro llamado a la humanidad: la ventana para mitigar los efectos del cambio climático se está cerrando rápidamente.
MÉXICO.- En 2024, México y 103 países vivieron el año con más calor registrado desde que se tienen datos confiables, es decir, desde 1850. Científicos de la UNAM, entre ellos Jorge Zavala Hidalgo, Francisco Estrada Porrúa y Amparo Martínez Arroyo, analizaron información de los principales centros climáticos internacionales para llegar a esta alarmante conclusión.
El incremento global de la temperatura alcanzó un promedio de 1.55°C por encima de los niveles preindustriales, rompiendo temporalmente la meta establecida por el Acuerdo de París de no superar 1.5°C. El fenómeno del gran calor este 2024 no solo se sintió en México, sino que afectó directamente a más del 40% de la población mundial, lo que equivale a unos 3,300 millones de personas.
El 2024, año más cálido registrado.
En todos los continentes se superó 1.5 °C la temperatura media mundial de los niveles preindustriales, según el Servicio de Cambio Climático Copernicus de la Unión Europea.
➡️ https://t.co/06FuLrrzLp pic.twitter.com/FTyNoEgnJW
— Gaceta UNAM (@Gaceta_UNAM) January 13, 2025
“Estamos viviendo un momento crítico”, alertó Estrada Porrúa, coordinador del Programa de Investigación en Cambio Climático de la UNAM. Además, advirtió que la segunda presidencia de Donald Trump podría aumentar en 4 mil millones de toneladas las emisiones de dióxido de carbono, intensificando aún más la crisis climática.
Los científicos destacaron que los efectos del cambio climático ya son evidentes: olas de calor extremas, sequías prolongadas, alteraciones en los ecosistemas y su impacto directo en la salud, la economía y la educación. “Es fundamental que todas las actividades, desde políticas públicas hasta decisiones individuales, incluyan la perspectiva del cambio climático”, enfatizaron.
Las proyecciones son desalentadoras: se prevé que el umbral de 1.5°C se supere de manera permanente a finales de esta década, y el de 2.0°C en la década de 2050. Esto podría desencadenar efectos irreversibles en los sistemas climáticos globales.
Ante este panorama, los expertos recomendaron adoptar políticas que combinen el bienestar social con la protección ambiental, como la reducción de emisiones, el fomento de energías renovables y estrategias de adaptación al cambio climático.
El 2024 no solo marcó un récord histórico de calor; también dejó un claro llamado a la humanidad: la ventana para mitigar los efectos del cambio climático se está cerrando rápidamente.