¿Seguirá cometiendo errores quien nunca acepta equivocarse?

Todos somos imperfectos y podemos aprender de nuestros errores y convertirnos en mejores personas.

El presidente Andrés Manuel López Obrador nunca acepta que comete errores. Cuando alguien le ha señalado evidentes fallas en su administración responde culpando a otros o diciendo que esas supuestas fallas son difundidas como parte de la campaña orquestada por los conservadores que buscan desprestigiarlo.

En él no se aplica la frase “Errar es humano, pero rectificar es de sabios”, que simplemente alude al hecho de que todos somos imperfectos y que podemos aprender de nuestros errores y convertirnos en mejores personas.

Debido a eso, es poco probable que alguna vez acepte, al menos públicamente, que se equivocó con Xóchitl Gálvez desde el día en que, para frustrar las aspiraciones de la senadora panista de ser candidata a la jefatura del gobierno de la Ciudad de México, la acusó de estar en contra de los programas sociales que tanto benefician a millones de personas.

El presidente basó su acusación en algo que dijo la senadora en un panel que se realizó en noviembre del año pasado en el marco de la Feria Internacional de Libro de Guadalajara.

Parte de lo que dijo Xóchitl fue “Yo estoy de acuerdo en apoyar a los que menos tienen, por supuesto que estoy de acuerdo en esas transferencias, pero me parece que es insuficiente (…) creo que lo que tenemos que hacer es que estos apoyos sean temporales, darles habilidades, educación, certificación y competencias laborales, generar fuentes de empleo para que la gente pueda salir adelante (…) pero mientras tanto sigamos dando los apoyos económicos”.

AMLO se agarró de la frase “lo que tenemos que hacer es que estos apoyos sean temporales” para decir que “Acaba de decir la señora Xóchitl Gálvez que ella va a quitar los programas de apoyo a los adultos mayores”. Pero ignoró que ella aclaró que mientras la gente no pueda ganar lo suficiente para tener una vida digna “sigamos dando los apoyos económicos”.

A partir de ese primer error, AMLO ha ido fortaleciendo la imagen de la aspirante que más posibilidades tiene hoy de convertirse en la candidata presidencial del Frente Amplio por México (FAM). Volvió a equivocarse cuando en junio le negó la entrada a una conferencia de prensa para que ella le aclarara que no está en contra de los apoyos sociales, cuando después la destapó como la candidata opositora a la presidencia y no a la jefatura de gobierno de la CDMX, cuando dio a conocer sus negocios violando leyes fiscales y de privacidad y ahora, ordenándole a algunos de sus incondicionales que la denuncien ante la FGR por supuestos malos manejos cuando fue delegada en Miguel Hidalgo, cargo que dejó en 2018 (ella niega haber cometido delito alguno).

El domingo, buscando debilitar la fuerza que Xóchitl ha cobrado, AMLO volvió a equivocarse al decir que podrían ser candidatos presidenciales los emecistas Samuel García, gobernador de Nuevo León, o Luis Donaldo Colosio, presidente municipal de Monterrey. Es claro que pretende debilitar a la oposición dividiendo a los votantes, pero todo indica que esto sólo fortalecerá más a quien sin querer lanzó a la candidatura presidencial del FAM porque, fuera de Nuevo León, tanto García como Colosio son políticos poco conocidos.

¿Seguirá cometiendo más errores quien aparentemente no aprende del pasado?

Twitter: @ruizhealy

Facebook: Eduardo J Ruiz-Healy

Instagram: ruizhealy

Sitio: ruizhealytimes.com




Más noticias


Contenido Patrocinado