A propósito del día contra la censura en internet

Sin duda que los tiempos han cambiado. Vivimos en la etapa digital, y con plataformas, herramientas y servicios al alcance, también han cambiado nuestro comportamiento y la responsabilidad que tenemos al hacer uso del internet. Como referente y para dimensionar lo importante que son las redes en nuestra vida, México ocupa el segundo lugar de América Latina con mayor cantidad de usuarios de internet con un 70.81% de la población de 6 años o más.

En el caso de Zacatecas, poco más de un millón de personas son usuarios de internet, esto equivale al 74.3% de la población del estado. Y es que cada vez es más común encontrar, incluso en comunidades rurales, la manera de acceder a la red. Y fenómenos como la pandemia por COVID-19, aceleró la transición que, como sociedad, estábamos llevando de los servicios a la era digital. Cosas que antes eran impensables en México como el home office o las clases virtuales ya son una realidad.

Y es por ello que vale la pena tener presentes fechas como la de ayer, 12 de marzo, en la que se conmemoró el día mundial contra la censura en internet. Pero en este artículo de opinión no trato solamente de compartir datos y estadísticas, estimado lector, sino de que esta fecha sirva para hacer consciencia del rol que debemos asumir, como sociedad y como individuos, en el uso libre, pero también responsable del internet.

Instituida desde el año 2008, y siendo producto de la iniciativa impulsada por la organización Reporteros Sin Fronteras, y Amnistía Internacional, esta fecha surge de la necesidad de hacer conciencia sobre lo importante que resulta que exista una verdadera libertad de expresión en internet. Es decir, poder expresarnos libremente, sin que nuestras opiniones y posturas nos genere alguna represalia o amenaza de otro usuario, institución o gobierno.

Y es que en teoría todo suena lógico, sin embargo, hay algunas conductas que van en contra de este principio y que son más comunes de lo que muchos creemos. El acoso a través de las plataformas, el consumo y difusión de información falsa, la propia censura que ejercen algunos países con sus ciudadanos y el uso irresponsable del internet, violenta y perjudica el ejercicio pleno de esta libertad.

Por ello es buena la reflexión de manera personal, ¿estamos haciendo buen uso del internet? La información que difundimos y/o consumimos, ¿es información verificada y que no perjudica los derechos de los otros internautas? Sin duda un tema que da para mucho debate, pero nadie puede negar que nos obliga a actuar con prudencia y responsabilidad en los espacios digitales.