Foto: Captura de pantalla (@UniCatolicos_es).
El Papa regresó al Vaticano y aunque aún se siente débil, no dejó pasar la oportunidad de saludar a sus fieles.
ITALIA.- El Papa Francisco de 88 años de edad, recibió este domingo el alta del hospital, después de haber permanecido ahí más de cinco semanas por una neumonía.
Durante su mensaje, en su oración dominical del Ángelus, de este día, Francisco exigió el fin de los ataques israelíes contra la Franja de Gaza, así como la reanudación del diálogo para lograr la liberación de “todos los rehenes”.
“Estoy entristecido por la reanudación del intenso bombardeo israelí en la Franja de Gaza, que ha causado tantos muertos y heridos”, escribió el papa.
“La situación humanitaria en la Franja de Gaza es una vez más muy grave y requiere el compromiso urgente de las partes en conflicto y de la comunidad internacional”, dijo.
Y es que Israel rompió el alto al fuego el 18 de marzo al reanudar su bombardeo de la Franja de Gaza antes de volver a enviar soldados a las áreas evacuadas durante la tregua.
El Papa regresó al Vaticano y aunque aún se siente débil, no dejó pasar la oportunidad de saludar a sus fieles que se encontraban reunidos afuera del hospital Gemelli de Roma.
“¡Gracias a todos!”, dijo el pontífice con voz débil ante un micrófono, sentado en una silla de ruedas y saludando desde el balcón.
“Puedo ver a esa mujer con flores amarillas, bien hecho”, dijo con una pequeña sonrisa.
🔴 El Papa Francisco reaparece en público tras estar 37 días ingresado en el hospital Gemelli.
Se ha asomado al balcón del hospital a la hora del Ángelus para saludar e impartir la bendición. pic.twitter.com/C6rp06UeJA
— Universitarios Católicos (@UniCatolicos_es) March 23, 2025
Estuvo en el balcón durante dos minutos y fue dado de alta de inmediato. Poco después llegó al Vaticano y se le pudo ver usando una cánula, un tubo de plástico metido en sus fosas nasales que suministra oxígeno.
Francisco se veía cansado, no obstante los médicos estimaron que su salud mejoró lo suficiente para que pueda irse a casa, aunque tiene por delante una larga recuperación de al menos dos meses.