Llegó el Cartero

Señor director:Sirva la presente para hacerle llegar mi cordial saludo desde la ciudad de Tepic y al mismo tiempo, comentarle que soy un zacatecano que hace muchos años se me brindó la oportunidad de venirme a trabajar a esta ciudad, pero nunca he dejado de darme mis vueltas a la ciudad que me vio nacer, … Leer más

ap | 02-05-2014

Señor director:
Sirva la presente para hacerle llegar mi cordial saludo desde la ciudad de Tepic y al mismo tiempo, comentarle que soy un zacatecano que hace muchos años se me brindó la oportunidad de venirme a trabajar a esta ciudad, pero nunca he dejado de darme mis vueltas a la ciudad que me vio nacer, la capital de Zacatecas, dos o tres veces al año para saludar a mi numerosa familia y a mis grandes amistades y excondiscípulos del glorioso Instituto de Ciencias de Zacatecas (ICZ).

Cuando vienen a visitarme mis familiares, les encargo ejemplares de su prestigiado matutino, no importa que sean números atrasados.

Pues bien, nos visitó una de mis sobrinas y desde luego que le pregunté por mi encargo, refiriéndome a Imagen y en el ejemplar No. 6034 disfruté entre otras noticias, en la sección “Sociedad” de la interesante entrevista que le hacen al señor Fuad Samán, propietario del legendario Café Nevería Acrópolis, hijo de don Said Samán Farah, a quien tuve el honor de conocer en mis lejanísimos años de estudiante.

En relación a ello, le anexo al presente, unas cuartetas que le dediqué al señor Said, con la esperanza de que si lo considera usted, pudiera dar a conocer estos sencillos versos a los cientos de sus lectores de la ciudad capital de Zacatecas.

Agradezco de antemano su amable y fina atención y sepa usted que aquí tiene su casa y una familia zacatecana que a diario vía internet disfrutamos de las noticias que nos brinda Imagen.

A don Said Samán Farah

A los zacatecanos
los convoco a oíd
mi humilde verso que
recuerda al hombre
que vino de Siria
y cuyo nombre
conservaré por siempre,
era Said.
Hay personas que jamás se olvidarán
dejaron huella en su
ejemplar camino
que de lejos los trajo a su destino
entre ellos llegó
el señor Samán.
Acrópolis, esta fecha
a todos nos depara
miles de anécdotas, y los que aún vivimos
podemos pregonar, ya que tuvimos
la fortuna de ser amigos de Farah.