No me refiero a la Iglesia Universal del Reino de Dios (IURD) conocida por la frase “Pare de sufrir”, y que ya tiene registro constitutivo como Asociación Religiosa en México, su nombre oficial es “Iglesia Universal del Reino de Dios Oración Fuerte al Espíritu Santo, SGAR 2499/2001”. Quiero analizar la parte humana en la que … Leer más
No me refiero a la Iglesia Universal del Reino de Dios (IURD) conocida por la frase “Pare de sufrir”, y que ya tiene registro constitutivo como Asociación Religiosa en México, su nombre oficial es “Iglesia Universal del Reino de Dios Oración Fuerte al Espíritu Santo, SGAR 2499/2001”.
Quiero analizar la parte humana en la que varias personas sufren porque no han podido tener la oportunidad de que alguien los oriente con información sobre su posible disolución de vínculo matrimonial, es decir la anulación del matrimonio en la iglesia católica.
A lo largo de mi vida en el servicio público, me he encontrado con personas que han compartido su experiencia al acudir al tribunal eclesiástico de su respectiva diócesis para recibir orientación de como anular su matrimonio y salen con más sufrimiento del que llevaban, porque les dicen que no tienen ninguna posibilidad o es muy largo y tedioso el proceso, ya que lleva de 1 a 3 años en que se resuelva.
Existen varias causas por los que un matrimonio puede ser considerado no valido de acuerdo con el Código de Derecho Canónico de la Iglesia Católica y las divide en tres grandes grupos:
1.- Las circunstancias externas que hacen imposible contraer matrimonio (impedimentos); 2.- Las circunstancias internas que afectan a la voluntad de quienes van a contraer matrimonio y hace esto invalido (vicios de consentimiento); y 3.- Las formalidades que se deben seguir para contraer un matrimonio valido (defectos de forma). Cada una de estas causas generales se puede subdividir hasta en 10 motivos por los cuales se puede declarar la nulidad matrimonial.
El ser humano busca ser feliz y evitar el sufrimiento, por eso debe tener siempre una actitud compasiva que abra su interior y como resultado le sea más fácil buscar la felicidad, porque cuando se tiene una actitud egocéntrica, sus emociones se convierten en miedo, duda, ira, celos y como consecuencia el interior se cierra, y así es muy difícil comunicarse con los demás y no puede ser feliz.
Demasiada actitud egoísta lleva a un aislamiento que se convierte en soledad y sufrimiento, porque entre más se piense en sí mismo, más egocéntrico se convertirá y los problemas crecerán; en cambio si te preocupas por los demás, tus emociones te llevarán a ser generoso contigo mismo y en automático serás feliz.
Incluir y no excluir, aceptar en vez de estigmatizar, comprender en lugar de señalar y abrazar en vez de abrasar es imprescindible.
Me pongo a sus órdenes para el trámite de su anulación matrimonial.
Imagen Zacatecas – Gerardo Luna Tumoine