El aumento del embarazo adolescente en México

La OMS menciona que el embarazo en adolescentes es un problema culturalmente complejo. Un tema que requiere educación y apoyo para alentar a las niñas a retrasar la maternidad hasta que estén preparadas.Las adolescentes menores de 16 años corren un riesgo de defunción materna cuatro veces más alto que las mujeres de 20 a 30 años, según un estudio de investigación del departamento de Reducción de los riesgos del embarazo de la OMS.

Se estima que 16 millones de niñas de edades comprendidas entre los 15 y los 19 años dan a luz cada año, asimismo, un 95 % de estos nacimientos se producen en países en desarrollo. Los partos en adolescentes como porcentaje de todos los nacimientos fluctúan entre alrededor del 2 % en China y el 18 % en América Latina y el Caribe.

En México, esta realidad se incrementa. El país tiene la mayor tasa de natalidad en mujeres adolescentes de todos los países miembros de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE): 62 embarazos por cada 1.000 son niñas y adolescentes. A pesar que entre los años 200 y 2006 se evidenció una reducción de más del 8 %, pero entre el 2007 y 2012 el incremento llegó al 15 %.

En muchos casos los embarazos entre adolescentes son no deseados. De acuerdo con estadísticas más de la mitad de quienes inician su vida sexual antes de los 19 años no utilizan métodos anticonceptivos. Por otra parte, la falta de educación sexual es la principal causa de esta problemática. Muchos adolescentes y jóvenes confían en ‘’métodos naturales’’ de dudosa eficiencia, sin ser conscientes de su exposición a diferentes enfermedades de transmisión sexual. Se debe tener en cuenta que, solo los preservativos también conocidos comúnmente como condones protegen a las personas de contraer ETS.

Además, el acceso a los anticonceptivos entre adolescentes de 15 a 19 años sexualmente activas no es equitativo. Según el informe Estado mundial de las madres de la ONG Save the Children, se evidencia la discrepancia en la influencia de uso de métodos anticonceptivos entre los estados más al sur de México, como Chiapas, con un 35,5 %, y el resto, donde se estima su uso en un 59 %.

También se suma el problema del desempleo y el abandono escolar por la situación de adolescentes embarazadas. Se han implementado estrategias como el Programa de becas de apoyo a la educación básica de madres jóvenes y jóvenes embarazadas de la Secretaría de Educación Pública. No obstante, las cifras muestran que tuvo poco éxito, debido a que solo cuenta con un 22 % de efectividad, lo que provoca una gran preocupación.