Rescata más de 30 cadáveres en 10 años de trayectoria como buzo

FRESNILLO.- En poco más de 10 años, Manuel de Jesús Álvarez de Santiago participó en el rescate de entre 30 y 40 personas fallecidas en cuerpos de agua.

El más reciente fue el rescate del cadáver de Alfonso, de 22 años, quien pereció en el bordo de la comunidad Sombreretillo.

En este servicio, el Departamento de Protección Civil y Bomberos de Fresnillo al que pertenece Álvarez de Santiago, trabajó por cinco días para poder localizar el cadáver.

Durante la búsqueda elementos de la Coordinación Estatal de Protección Civil y de Ricardo Flores, brindaron apoyo y prestaron equipo especializado para la localización del joven.

En entrevista, el hombre, que está por cumplir 37 años, refirió que el rescate que marcó más su carrera fue el ahogamiento de tres niños el 30 de abril de 2012.

Relató que los padres de los menores, quienes se metieron a nadar en un bordo en la colonia Sotoles de esta ciudad, pedían a gritos que rescataran a sus hijos con vida.

Tras una búsqueda intensa de los cuatro pequeños, uno pudo salir y ponerse en manos de los paramédicos de la corporación quienes lograron reanimarlo.

Sin embargo, no fue el mismo destino para sus amigos quienes fallecieron ahogados y le correspondió al equipo de buzos del municipio localizar sus cuerpos.

Otro de los rescates más complicados para Manuel de Jesús, fue el de una familia de cinco personas quienes se ahogaron en la presa de Tepechitlán, en donde trabajaron en su búsqueda durante siete días.

El buzo afirmó que se trata de un trabajo en equipo, pues además de quienes se sumergen, hay quienes llevan el control del aire que se consume, una persona que remolca y otra más que viaja en una lancha.

Comentó que el riesgo en cada servicio es latente, pero la disposición por encontrar los cuerpos y permitir que sus seres queridos se despidan de ellos les brinda fuerza para desempañarse en cada llamado.

Manuel de Jesús se especializó con respaldo de tres buzos de origen español y después obtuvo las certificaciones requeridas en un proceso a mar abierto, a profundidades de 33 metros, con buceo nocturno, localización y ubicación.

Además de realizar los rescates en incidentes en Fresnillo, también participó en otros en Sombrerete, Juan Aldama, Francisco R. Murguía, Tepechitlán y Valparaíso, además de una región en colindancia con Nayarit, en Aguascalientes y en Veracruz, después de un huracán.