Lizbeth deja el capullo y se convierte en hermosa princesa 

Sumamente hermosa y con una apariencia angelical, Lizbeth Márquez Carrillo llegó al templo del Señor de los Rayos para dar gracias a Dios, ya que en cada paso que ha dado siempre ha estado ahí.  

Bella y encantadora, inició su día especial al lado de sus padres, Yolanda Carrillo Escobedo y Juan José Márquez. 

Los primeros en felicitarla fueron sus hermanos Juan José y Carlos Eduardo. 

Después de felicitarla, externarle sus mejores deseos y cantarle Las Mañanitas, sus hermanos se dirigieron con ella al templo. 

Sus padrinos, Rodrigo Carrillo y Esthela Vázquez, la acompañaron y le hicieron saber que siempre estarán a su lado.

Después de la ceremonia religiosa, la comitiva se reunió en el Casino Fresnillo, donde se ofrecio una exquisita cena. 

El salón fue decorado con el estilo del vestido de la quinceañera; predominó el blanco con el rosa y detalles en plata. 

Estos colores son los favoritos de Lizbeth, pero también son los que mejor definen su personalidad. 

En el lugar ya la esperaban sus seres queridos y también su bisabuelita, Socorro Camacho Hernández, así como otros invitados que acudieron de distintas partes del país. 

El vals fue un momento enternecedor y la entrega de la última muñeca hizo que rodara una lágrima en algunos de los invitados.

Después bailó la primera pieza de salón con su padre, con lo que se abrió la pista. 

El Caballo y su banda La Loma pusieron a todos los invitados a bailar. 

Sus amigos la consintieron e hicieron sentir muy especial y no se cansaron de decirle cuánto la quieren. 

Imagen Zacatecas – Gema Gallegos