El Runrún: Dos zacatecanos, en la élite que planeará reformas para el país

El viernes de la semana pasada Felipe Borrego concluyó su periodo como consejero de la Judicatura Federal. El zacatecano labró a lo largo de estos años un prestigio enorme como profundo conocedor del poder judicial y como un hombre equilibrado, razonable y de ideas firmes.
Felipe Borrego fue sin duda un gran reformador en el Poder Judicial, enfrentó con valor y éxito intereses creados y cotos de poder a los que combatió y demostró siempre un amplio conocimiento, una verticalidad a toda prueba y un valor que usó en favor de las mejores causas del país como consejero de la Judicatura.

Dos encargos
Sin duda por eso, en el mismo acto protocolario donde Borrego pronunció su discurso de fin de ciclo, el presidente de la Suprema Corte de Justicia, Arturo Zaldívar, le hizo dos encargos. Uno, que sea en el enlace entre el Poder Judicial y los otros dos poderes, el Ejecutivo y el Legislativo; el segundo, el más importante, que sea el representante del Poder Judicial en las reformas al Poder Judicial que ha planteado el Presidente de la República. Esto supone que Felipe Borrego negociará entre otros, con Ricardo Monreal, como presidente de la Junta de Coordinación Política en el Senado. Esto significa que por primera vez en la historia hay dos zacatecanos directamente involucrados en la elaboración de políticas públicas de hondo calado para el presente y futuro del país.

Pide 3 millones de pesos
Raúl Carmona, el exminero que se instaló en Plaza de Armas, quiere hacer el negocio de su vida y está aferrado a que Peñasquito le pague 3 millones de pesos de liquidación. Por no cumplir con su chamba, fue despedido hace 2 años, pero hasta ahora se le ocurrió que puede hacer grilla y ha rechazado ofertas de finiquito que triplicaban lo que legalmente le correspondía por 6 años de trabajo. Este hombre le hizo el mismo argüende en 2010 a la entonces gobernadora Amalia García para exigir dinero, luego de que lo despidieran de la presidencia de Villa González Ortega.

En la mira
Como parte de la revisión de temas dentro del proyecto de Ley de Obra Pública, los diputados locales Lalo Rodríguez y Lolo Hernández traerían en la mira a Luisito Maldonado, titular de SAMA, pues se estima que ya estaría manejando más recursos en licitaciones que el propio Jorge Luis Pedroza, secretario de Obras Públicas. Recientemente, la SAMA quedó a cargo del Ecoparque Centenario, y tal parece que en la dependencia buscan ampliar su margen de control y poder.

Se queda callado
El diputado Javier Calzada se ha salido molesto de varias reuniones de comisiones porque lo incomodan con preguntas que no puede o no quiere contestar. “¿Cuánto nos dejó el Palacio de Convenciones (del sexenio de Amalia)?”, le han recriminado al legislador. Algunos también lo acusan de quedarse callado ante algunos episodios de la expresidenta del DIF estatal, Claudia Corichi, de cuando iba a recoger relojes de más de 20 mil dólares en Nuevo León, con dinero de quién sabe dónde.

Runrunazos
Grilleros barzonistas tienen en la mira al jurídico de la Secampo, Luis Ricardo Martínez, por presuntas peticiones de apoyo que porque tiene su coche en el taller. * Mientras todavía pelean los priístas Fuensanta Guerrero, hija de Araceli Guerrero, y David González por el control de la dirigencia juvenil, se dice que Omar Tellez, regidor de Pinos, buscará convertirse en el líder. Y como el priísmo de ese municipio está muy bien parado en el comité estatal, todo indica que será el bueno. * Todos los legisladores de y por Zacatecas tienen la tarea de defender el presupuesto para el estado el próximo año, ante la intención de darle un bajón aproximado de 30 mil millones a 23 mil millones de pesos. El petista Alfredo Femat tendrá que hacer a un lado sus reuniones con diplomáticos y sumarse a la lucha; y Carlos Pavón olvidarse por un momento de la grilla minera.