Casta Llaguno

La noche del pasado jueves tuve la oportunidad de charlar vía telefónica con el ganadero zacatecano de reses bravas José Miguel Llaguno Gurza hijo del inolvidable José Julián y nieto de Don Julían Llaguno González.
El tema de nuestra plática fue referente a la delicada situación por la que atraviesan los ganaderos mexicanos ante la pandemia por el COVID/19.

Fue muy triste escuchar la expresión de preocupación del ganadero al referirse que los toros que debían lidiarse y matarse en una plaza de toros han tenido que ser lidiados y muertos a puerta cerrada.

“Ha sido muy doloroso para nosotros tener que actuar de esta manera, las “camadas” que vienen hay que seguirlas cuidando y atendiendo pero no podemos tener en el rancho a un número determinado de toros que incluso ya habían sido reseñados por varios empresarios y que hay que darles muerte “—nos dijo José Miguel.

Hablar del apellido Llaguno es evocar las figuras de los hermanos Antonio y Julían Llaguno González fundadores de las emblemáticas dehesas de San Mateo y Torrecilla y luego recordar a Pepito, uno de los hijos de Don Julían, el menor de los hermanos José Antonio y Ana María.

En la actualidad, José Miguel Llaguno maneja las ganaderías “José Julían Llaguno” y “Arroyo Hondo” ubicadas en el municipio de Saín Alto,Zac.

Al referirse a la situación imperante por la contingencia sanitaria que ha dado un golpe durísimo a la fiesta de los toros no solo en nuestra patria, José Miguel recuerda a su papá quien le heredó la seriedad y el señorío ganadero.

A pregunta expresa de un servidor, lamentó de verdad que se hayan tenido que sacrificar toros con edad, la siempre impecable presentación manteniendo un concepto y un tipo en su ganado que lo ha hecho inconfundible.Al igual que su abuelo y padre, José Miguel es un hombre de campo, ha sido su pasión y heredó de Pepito los conceptos de manejo de los agostaderos y la crianza del toro bravo.

¡Hasta el próximo lunes!