El poder por el poder

Carlos López Gámez.
Carlos López Gámez.

Para nadie es desconocido del todo las inseparables tácticas a las que recurren algunos engallados partidos políticos por logros en las urnas para asumir cargos de elección popular, y de esa manera, convierten las posiciones en posesiones. Es el poder por el poder, nada de idealismos, de ninguna manera, predomina tan solo la insaciable hambruna … Leer más

Para nadie es desconocido del todo las inseparables tácticas a las que recurren algunos engallados partidos políticos por logros en las urnas para asumir cargos de elección popular, y de esa manera, convierten las posiciones en posesiones. Es el poder por el poder, nada de idealismos, de ninguna manera, predomina tan solo la insaciable hambruna de poder y ambiciones personales.

En tiempos relativos a procesos político-electorales, es conveniente tocar ese tipo de estrategias o vulgares imposiciones practicadas con lujo de violencia maquillada de verborrea populista y demagógica, y así sacar conclusiones tanto del método impuesto, y de paso, analizar el silencio del pueblo que enmudece y no se atreve a manifestarse en contra de las vulgares y abusivas pretensiones de los impuestos por el poder del poder político.

Uno de estos ejemplos ocurrió en Fresnillo y conservamos las evidencias de semejante atrevimiento. Fue un ejemplo imborrable de lo que es el poder por el poder. El asentamiento es parte de un acta de cabildo del mes de septiembre de 1923. En el pleno se da lectura de un comunicado del PNR que es dirigido al presidente municipal. Se le informa que el partido “decidió” que el señor Cesáreo Pinedo entre en funciones como regidor del ayuntamiento, en sustitución del señor Rodrigo M. López, y se agrega de paso que, los regidores Varela, Cázares y Castillo, incluso el propio López ya están de acuerdo.

Es natural la reacción, el síndico no acepta la imposición y propone una comisión para que estudie el asunto. El regidor Cázares interrumpe para expresar que el diputado Arana ya estaba de acuerdo con el cambio. Al final de cuentas se acuerda el resultado de la comisión. El día 30 de septiembre el dictamen de la comisión niega la inclusión de Pinedo al ayuntamiento.

Lo anterior fue tan solo una referencia de la manera en que actuaba el Partido Nacional Revolucionario, creado por Plutarco Elías Calles. Su heredero fue el PRI moderno, las tácticas fueron su identidad de siempre. En el presente, los ejemplos se reproducen; los practican y los hacen vigentes quienes abrevaron de las doctrinas del vetusto PNR y de ello, abundan millares de ejemplos. Sus emisarios solo cambiaron de colores, las enseñanzas son las mismas que en 1927.

Entre otras cosas, ¿quién era Cesáreo Pinedo y de dónde provenía su influencia en el PNR de aquellos lejanos años? Era jerezano para empezar y llegó a ser presidente municipal en Fresnillo en el año de 1928. Ocupa el cargo que detentaba Rafael Yáñez Sosa, quien abandona el puesto para sumarse a las filas del cacique Guillermo C. Aguilera y participar en la rebelión escobarista.

Pinedo era parte, a su vez, de grupos llamados agraristas que emprendían poseídos de una especie de odio satánico tórridas batidas en contra de los llamados cristeros. De ahí su influencia en el partido político en cuestión.

Este personaje, junto con otros jerezanos, incluso el presidente municipal, se dieron a la tarea de perseguir al presbítero Félix de la C. Castañeda, logrando aprehenderle en la comunidad de Juancho Rey luego de haber terminado la celebración de una misa. Varias personas del lugar intentaron abogar por el sacerdote; sin embargo, sus ruegos jamás fueron escuchados por los sujetos que participan en la captura.

Días después de su aprehensión y detención en una pieza de la antigua presidencia municipal, el cual más adelante fue oficinas de la Recaudación de Rentas, el padre Castañeda fue llevado al panteón de la Soledad en donde ya se tenía preparada una fosa. En la nota se asentaba que aún con vida, el sacerdote fue arrojado a la tumba. Al enterarse de lo ocurrido, la comunidad jerezana acudió al cementerio constatando lo que en el pueblo se pregonaba.

El horrendo crimen consternó a la comunidad jerezana y localidades regionales donde era sumamente conocido y apreciado el presbítero Castañeda.

Con el tiempo la verdad empezó a surgir por todos lados, se hicieron los señalamientos requeridos; sin embargo, jamás se realizó nada para castigar tanto a los autores intelectuales como materiales del crimen.

Durante el corto periodo que Cesáreo Pinedo estuvo al frente de la presidencia municipal de Fresnillo, las actas de cabildo que logramos rescatar y de las cuales conservamos copias registran infinidad de situaciones irregulares y de un total desconcierto desde el interior del cabildo hasta en las posiciones con relación a funcionarios públicos.

Se cataloga que su efímera participación al frente del ayuntamiento fue desastrosa en todos los conceptos, fue y se considera que ha sido el comportamiento de los sujetos que han sido impuestos por parte de los caciques y caudillos para desempeñarse en cargos de elección. Demuestran ineptitud en materia administrativa; su actitud es perjudicial para la comunidad. Ejemplos abundan.

En tiempos electorales se suelen usar estrategias de imposición.



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