Aumenta demanda en tanatología por pandemia

Los tanatólogos están tratando a las personas que perdieron familiares por el Covid-19.

ZACATECAS.-Desde que inició la pandemia por Covid-19, la demanda para los tanatólogos ha ido en aumento.

En el caso de Bertina Ponce Villalobos, ha visto un aumento de hasta 80% de pacientes, lo que atribuye directamente a las pérdidas humanas originadas por el coronavirus.

Por otro lado, el aumento de trastornos como ansiedad, depresión o tristeza también se han presentado; sin embargo, en estos casos, el paciente debe ser diagnosticado por un psiquiatra o psicólogo.

Cabe señalar que el objetivo de la tanatología es proporcionar ayuda profesional al paciente con una enfermedad en etapa terminal y a sus familias, o a una persona que viva algún tipo de pérdida.

Ponce Villalobos compartió que después de un receso derivado de la pandemia, volvió a recibir pacientes para realizar “un recuento de daños”; en su caso atiende a varias familias con pérdidas de varios miembros.

Ejemplificó con el caso de una de sus pacientes, quien perdió a su madre y a esposo derivado del Covid-19; por que ella y sus hijos terminaron afectados, pero a quienes no pudo tratar al mismo tiempo, ya que son adultos y llevan a cabo un duelo de forma distinta.

La especialista explicó que son situaciones que no están previstas dentro de los estudios de la tanatología y “son cuestiones atípicas de trabajo”; estos obstáculos, añadió, deben resolverse con herramientas de las propias experiencias y vivencias de los pacientes, quienes poco a poco están saliendo adelante.

No todos pueden pagar una terapia

Las familias atacadas por el virus continúan con el temor de que le pase algo a sus familiares, quienes pueden pagar una terapia tanatológica reciben la ayuda profesional; en cambio quienes no “se las arreglan solos, lo que es una situación penosa y dolorosa”, sobre todo en aquellos hogares donde hubo pérdidas múltiples.

Ponce Villalobos aseguró que el tanatólogo brinda acompañamiento al paciente, ayudándole a sobrellevar la pérdida de sus seres queridos y “sanando sus almas, que quedaron dañadas, con miedo e incertidumbre”.