Ritual para detener a quien causa problemas

Escribe el nombre de la persona en un pedazo papel estraza o blanco, dóblalo 2 veces, toma un limón y hazle dos tajos profundos, uno en diagonal y uno en horizontal, pero no lo cortes.

Coloca el papel dentro del limón y únelos con dos clavos de acero largos. Ahora, el pon el limón en un frasco de vidrio limpio y en él un poco de cenizas de cualquier tipo de madera o hierbas.

Además, échale sal y vinagre para que por fin cierres el frasco con la tapa, procura hacerlo con fuerza. Al final, pon el recipiente en un lugar seguro donde otros no lo vean.

La ceniza y la sal frustran los esfuerzos de quien busca dañarte y el vinagre y el limón a la vez vuelven “agrios” sus propios asuntos para esa persona.