Desconfían de supuestos vendedores de perfumes

ZACATECAS.- Algunas mujeres se encuentran en alerta por la presencia de supuestos vendedores de perfume en las calles, quienes las obligan a oler el producto y luego ellas se comienzan a sentir mal; las autoridades desconocen la situación.

Afectadas denunciaron a Imagen que estos hechos ocurren en la zona conurbada Zacatecas-Guadalupe.

Detallaron que “una o dos personas se aproximan a las personas para ofrecer las fragancias y al olerlo genera mareo y pérdida de la vista”.

Una de ellas narró que estaba frente a la Catedral y un sujeto la abordó y le aseguró vender perfumes originales a menos de la mitad de su costo.

“De inicio me llamó la atención y el hombre sí traía como tres diferentes, pero me presionó mucho para olerlo y fue cuando sospeché”, dijo.

Pese a su incomodidad, dijo, extendió su brazo para olerlo y aseveró haber tenido molestia en la cabeza y la vista nublada en ese momento.

Explicó que el hombre no dijo nada, ella le agradeció y se retiró; sin embargo, el supuesto vendedor la siguió por un momento.

“Iba camino a encontrarme con más personas, cuando me vio acompañada ya no me siguió, pero fue muy extraño”, comentó.

Al principio no le dio importancia al suceso, pues el malestar lo atribuyó a la mala calidad de las esencias.

Mediante redes sociales otras mujeres reportaron hechos similares, en donde expusieron la inseguridad a la que se enfrentaban con estas prácticas, pues hubo quienes estuvieron a punto de desvanecerse.

En Facebook, varias personas aseguraron vivir una situación similar y que había otras personas esperando al “vendedor”, en un coche.

Sin reportes

Eduardo Muñoz Franco, director de la Policía Municipal de Zacatecas, comentó que no tienen reportes de estas situaciones y tampoco lo han notado en las calles.

Sin embargo, aseguró que estarán pendientes de los vendedores ambulantes, ya que en Plaza Bicentenario hay comerciantes que se dedican a la venta de fragancias.

Aunque reconoció que “en estos negocios no incitan a las personas a que se aproximen, ni mucho menos las hostigan para que las huelan”.