Defendían escuelas a docentes abusadores

ZACATECAS.- La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Zacatecas (CDHEZ) documentó dos casos de profesores acusados de abuso sexual, que tuvieron consideraciones por personal de las escuelas donde trabajaban.

Uno de los casos ocurrió en una primaria de Sain Alto, la Miguel Hidalgo y la queja se documentó en el expediente CDHEZ/315/2019.

Según las investigaciones que hizo la comisión, Modesto “N” tenía antecedentes de acoso, tendiendo conocimiento el supervisor y jefe de zona. Pese a ello, solo lo habían cambiado de adscripción.

El 12 de abril de 2019, una madre de familia se enteró que el citado profesor estaba realizado tocamientos lascivos a su menor hija y a otras niñas del grupo.

La madre se inconformó porque luego tuvo una junta con el  director de la escuela y el supervisor  y ahí supuestamente trataron de persuadir a las mamás quejosas a no denunciar, pues les decían que si iban al Ministerio Público iba a ser un proceso largo y que las niñas iban a ser interrogadas por médicos y psicólogos.

Las investigaciones revelaron que el supervisor Jesús Magallanes y el director de la primaria ya sabía de los antecedentes del docente Modesto, pero el director “quiso darle otra oportunidad”.

La denuncia contra el profesor Modesto se interpuso en mayo de ese año. Cuando se interpuso una queja en la CDHEZ por la omisión del personal de la escuela y el supervisor, el profesor ya se encontraba en la cárcel distrital de Sombrerete, debido a las acusaciones de abuso sexual.

La comisión recomendó a la Secretaría de Educación de Zacatecas elaborar un padrón con docentes y directivos que tuvieran antecedentes de conductas de índole sexual en agravio de los estudiantes.

Caso sin resolver

Otra queja por presunto abuso sexual de parte de un profesor se interpuso por el caso de una escuela de Ojocaliente; el caso está documentado en el expediente CDHEZ/454/2019.

Según declaraciones de madres de familia y menores, un docente de esta escuela sentaba a las estudiantes en sus piernas y les hacía tocamientos indebidos.

Cuando se planteó poner una denuncia penal contra el profesor, surgió preocupación por parte de directivos del plantel, debido a que perjudicarían el trámite de jubilación del profesor acusado.

Hay testimonios de que el maestro había estado plantando algunos árboles afuera de su salón, pero ante las quejas de sospechas de su conducta, mandaron podar estos árboles  a fin de que no quedara oculto lo que ocurría en este salón.

En su defensa, el profesor alegaba que las mismas estudiantes se le acercaban, aunque las acusaciones las menores decían lo contrario.

La CDHEZ reveló que el director del plantel confrontó a una de las madres denunciantes, “para preguntarle porqué había denunciado al maestro, que primero debió hablar con él y con el maestro para saber su versión ya que con eso que había pasado, no se iba a poder jubilar”.

Posterior a ello, intervino un abogado de la Comisión Integral de Atención a Víctimas pidiéndole al director del plantel que no interviniera en el asunto.

Hasta el momento, a dos años de que se interpusiera la denuncia, la Fiscalía General de Justicia no ha podido acreditar que el docente incurrió en abuso sexual.

Por esta situación, en Derechos Humanos recriminaron que el proceder de la Policía de Investigación ha sido ineficaz para resolver el caso.