¡Veto a las herramientas legislativas!

Hoy en la Opinión de Jaime Santoyo Castro.
Hoy en la Opinión de Jaime Santoyo Castro.

Desde hace tiempo en Zacatecas se discute un tema relacionado con una parte de los recursos económicos de la Legislatura local, llamada “apoyos sociales” y/o  “herramientas legislativas”, consistente en una asignación presupuestal a los legisladores para ayudarlos a preparar iniciativas o dar apoyos a la población.   Unos afirman que ese dinero se dedica a … Leer más

Desde hace tiempo en Zacatecas se discute un tema relacionado con una parte de los recursos económicos de la Legislatura local, llamada “apoyos sociales” y/o  “herramientas legislativas”, consistente en una asignación presupuestal a los legisladores para ayudarlos a preparar iniciativas o dar apoyos a la población.

 

Unos afirman que ese dinero se dedica a otorgar ayudas a diversas personas, y a contratar asesores para elaborar iniciativas de ley, o para recorrer sus distritos, etc. Otros niegan que ese sea el destino de los dineros, y que de una u otra manera, va a parar sencillamente a los bolsillos de los diputados y de ahí surge una serie de acusaciones, que tienen que ver con factureros y facturas fantasmas; pero entre dimes y diretes, se sigue peleando por esos recursos.

 

Es cierto que a los Diputados los busca la gente para que les den ayudas; y también es verdad que muchos de ellos necesitan pagar a alguien que los oriente en ciertos temas, toda vez que no pueden saber de todo; pero dentro de nuestro sistema de división de poderes, al legislativo le corresponde legislar, y no la de entregar ayudas o apoyos, porque esta actividad le corresponde al Ejecutivo. Por eso, en 2018 se adicionó un párrafo segundo a la fracción IV del artículo 65, específicamente para prohibirle presupuestar recursos para ayudas sociales, además de la reforma al primer párrafo, para precisar el orden en el manejo de los dineros.

 

Es indudable que se requieren herramientas para trabajar, pero las herramientas de un legislador son cercanía con la gente, sensibilidad para escuchar, estudio, experiencia, responsabilidad social, compromiso de servir, honestidad y transparencia, y eso no se obtiene con dinero.

 

Cada Diputado debe tener uno o dos asesores, capacitados para orientar y preparar temas de discusión e iniciativas, pero si en lugar de darle empleo a expertos se contrata a familiares, amigos y compadres, es claro que no le van a servir ni al diputado ni a la legislatura.

 

Recientemente el órgano legislativo aprobó una reforma otorgándose liberalidad para disponer nuevamente de los recursos llamados “herramientas legislativas”, decreto que fue rechazado por el Gobernador David Monreal Ávila, en una decisión acertada que sin duda está orientada a poner orden en este rubro. ¡ Zapatero, a tus Zapatos!




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