Prevenir y Punto Final

Las crisis del coronavirus Covid-19, nos movió la agenda, el ritmo y las prioridades a todos; decenas de países han dispuesto enormes campañas de prevención.

Esto ha generado controversia sobre las acciones que cada entidad toma, abundan los reclamos sobre las políticas públicas que el gobierno federal ha implementado, los acusan de omisos.

Aunque, los defensores y funcionarios del gabinete digan lo contrario y presuman los reconocimientos de la Organización Mundial de Salud (OMS).

Sin tomar partido o bandera, lo cierto es que cada país ha procurado tomar las medidas más pertinentes para su población, geografía y sistema de salud.

Sin importar la ideología u orientación, las entidades con mejores resultados son las que previnieron mejor.

En nuestro país existe un amplio sector que insiste en que se está exagerando la situación, entiendo la posición política e ideológica, pero no la lógica.

Invocan que Estados Unidos, Disneylandia, San Diego, Los Ángeles, San Francisco, entre otros estados, sólo tomaron medidas de contención hasta que hubo 200 infectados.

Viajeros mexicanos en Europa mencionaban que no había porque preocuparse debido a que en los aeropuertos y estaciones no había ningún filtro sanitario o preventivo.

Sin embargo, es ahí donde radica el peligro, la posible expansión por contagio.

Al no haber filtros sanitario ni medidas de contingencia crece el peligro de contagio, el New York Times calculó la tasa de infección en 244 víctimas por persona infectada, otros cálculos más severos lo elevan hasta 310 posibles víctimas por infectado.
Más allá de ideología o preferencia política la política pública más exitosa es la de la prevención.

No tenemos que esperar a que haya uno, dos, 10 o 300 contagiados para actuar.

La política pública de salud de eso se trata, de evitar que haya enfermos, que no haya focos de infección; si para eso hay que cancelar masivos, conferencias o clases adelante, lo importante es que el mayor número de personas tenga el menor número de exposiciones al virus y en el peor de los casos, el menor riesgo de contagio.

Ni en aprecios, ni en dineros, ni emergencia se comparan los costos de prevención a los de atención.

Punto Final

Más vale prevenir…

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