Yo me quedo en casa

Juan Carlos Ramos León.
Juan Carlos Ramos León.

Pasó el domingo y las campanas de los distintos templos de esta ciudad no llamaron a misa. El sábado en la noche la autoridad federal instó al pueblo mexicano a quedarse en casa, práctica que los ciudadanos, por nosotros mismos, consideramos conveniente realizar desde hace ya casi quince días, aunque no todos. Hay quien ha … Leer más

Pasó el domingo y las campanas de los distintos templos de esta ciudad no llamaron a misa.

El sábado en la noche la autoridad federal instó al pueblo mexicano a quedarse en casa, práctica que los ciudadanos, por nosotros mismos, consideramos conveniente realizar desde hace ya casi quince días, aunque no todos.

Hay quien ha hecho algunas mofas con respecto al tema de quedarse en casa comentando: “por una vez nos mandan a la casa y ahora resulta que no queremos irnos, tal vez, precisamente, porque nos lo piden y no porque nazca de nosotros mismos”.

Estamos viviendo esta etapa con miedo. Pero hasta pareciera que tenemos más miedo a quedarnos encerrados en casa que a contagiarnos del virus que nos trae de cabeza. Y la verdad yo quisiera, a través de estas líneas, tratar de ayudar un poco a quien o bien no se ha dado cuenta de que tiene miedo a quedarse en casa o lo sabe, pero no quiere aceptarlo.

Primero, esto es temporal. Tal vez uno o dos, quizás hasta tres meses. ¿Y? ¿Qué es ese tiempo comparado con el que nos resta por vivir como veníamos haciéndolo? Segundo, la casa no es una prisión.

No estamos en arresto domiciliario. No se pierde libertad al permanecer encerrados en el único lugar en el que somos verdaderamente indispensables, en el que se lamenta nuestra partida y se goza con nuestra llegada. Permanecer en casa nos ofrece una diferente -y quizás más plena- manera de ejercer esa libertad.

Tercero, todos los asuntos que no sean el cuidado de nuestra salud pueden esperar. De veras. No vamos a ir a la quiebra, no vamos a quedarnos sin empleo o bien ya conseguiremos otro.

El único asunto que impera hoy es el cuidado de nuestra integridad y la única forma de hacerlo es quedándonos en casa.

Nuestra casa puede ofrecernos cosas más interesantes de las que quizás nos habríamos imaginado, lo que pasa es que vivir en ella nos ha creado una cierta miopía que impide percatarnos de ellas.

¡Animémonos a descubrirlas junto con aquellos a quienes amamos y con quienes la compartimos!

*Email: soyciudadanodeapie@ gmail.com

 

 

 




Más noticias

juan carlos ramos leon
juan carlos ramos leon
juan carlos ramos leon
juan carlos ramos leon
juan carlos ramos leon
juan carlos ramos leon

Contenido Patrocinado