E pluribus, unum
“De muchos, uno”.
“De muchos, uno”. Es el significado de este latinajo. El pueblo mexicano, que es bueno y sabio, refiriéndose a la necesidad de castigar a los corruptos y la obra teatral intitulada Emilio Lozoya, traduciría esta frase con sorna y rabia diciendo: “pues aunque sea uno”.
Nadie puede negar la enorme corrupción e impunidad que se desplegó particularmente en el sexenio anterior y el daño que causó al patrimonio de la nación; el quebranto a la ley, a las instituciones, a la confianza ciudadana, y el descrédito internacional para nuestro país y para los mexicanos.
La corrupción y la impunidad; por sí solas, se constituyeron en causas tan poderosas, que fueron capaces de sumar la voluntad popular en favor de quien ofreció barrer con ellas de arriba para abajo; abatirlas y limpiar para siempre a la nación de esos males, aunque a 19 meses de gobierno, más allá de los discursos y montajes, poco se ha cumplido de esa promesa justiciera.
En el equipo del presidente hay distinguidísimos representantes de esa clase gobernante corrupta, mentirosa y abusiva, como para que no se nos olviden. Creo que están como ejemplo de lo que no debe ser.
A estas alturas, no vemos a los corruptos en la cárcel; antes al contrario; hoy somos testigos del inexplicable trato tan fino y delicado que se le ha dado al exdirector de Pemex, al que se le ha cuidado para que no pise la cárcel, y para que no sea expuesto ante los medios. Aquí, y en otros conocidos casos, se ha aplicado muy bien aquello de “besos y abrazos”.
Testigo colaborador se le ha dicho, sin explicar en qué va a consistir su colaboración y cuál va a ser su pago, montando un show que a la vez sirve para desviar la atención del Covid-19, del avance de la inseguridad, de las reformas para comprar sin licitaciones y de otros descontentos sociales.
Nadie duda de los buenos oficios de Lozoya como colaborador, pues es pública y notoria su eficiente colaboración con las causas de Ancira, de Odebrecht y otros.
Ojalá y colabore con la justicia como tan eficientemente colaboró con la ilegalidad, y no sea sólo uno de muchos.