Aumentan las personas sin religión en México

Gerardo Luna Tumoine.
Gerardo Luna Tumoine.

El censo Inegi 2020 ha arrojado los datos en diversidad religiosa de la población en México y el 8.1% de la población dice que no tiene una religión. En México, 10 millones 211 mil 52 personas dicen no tener una religión, de acuerdo con datos del Censo de Población y Vivienda del Inegi 2020. Este … Leer más

El censo Inegi 2020 ha arrojado los datos en diversidad religiosa de la población en México y el 8.1% de la población dice que no tiene una religión.

En México, 10 millones 211 mil 52 personas dicen no tener una religión, de acuerdo con datos del Censo de Población y Vivienda del Inegi 2020. Este dato casi se duplicó con respecto al censo de hace 10 años, cuando este porcentaje era de 4.7 por ciento. En tanto, las personas sin una adscripción religiosa, pero que son creyentes, llegaron a 3 millones 103 mil 464 en 2020, mientras que no se tenía registro en 2010.

Haciendo historia, al inicio del siglo XX, la población católica en México era de 99.1 %, en 1930 cayó al 97.7%. Para el año 1970 fue del 96.2%. Para el año 1990 fue del 89.7%, en el año 2000 87.9% y en el último censo del 2010 era 82.7%. y ahora en el censo 2020 la población católica es del 77.7%. En 110 años ha habido una reducción de casi 21 puntos porcentuales.

Católico en 2010 fue de 82%, en el 2020 de 77.7%. Cristiano Evangélico  en el 2010 7.5 % y  en el 2020 11.2%. Sin adscripción religiosa en 2010 2.5%, en el 2020 4.7% y sin religión en el 2010 4.7% y en el 2020 es el 8.1 por ciento.

En México, 97 millones 864 mil 218 personas pertenecen a la religión católica, 14 millones 95 mil 307 son de la religión protestante/cristiano evangélico, 58 mil 876 son de la judaico cristiana y 7 mil 982 de la islámica.

En México hay 126 millones 14 mil 24 habitantes. De los cuales, 61 millones 473 mil 390 son hombres y 64 millones 540 mil 634 son mujeres. Hay 2 millones 576 mil 213 personas que se autorreconocen como afromexicanas.

Estamos en una sociedad mas plural y diversa y más allá de los presagios que anunciaban que la modernidad llevaría a un desencanto del mundo, y que las creencias en fuerzas extraordinarias serían reemplazadas por la racionalidad del progreso tecnológico y científico, hoy en día la religiosidad continúa siendo un importante referente de las identidades contemporáneas, y se mantiene como una fuente de sentido y explicación del mundo aunque hay un notable crecimiento de la pluralidad. La clave de la felicidad reside en la fuerza mental de practicar el respeto y la tolerancia para hacer grande el entorno.




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