Atacan a Salman Rushdie, está conectado a un respirador artificial

Foto: Facebook.
Foto: Facebook.

Los asistentes ayudaron a alejar al atacante, Rushdie cayó al suelo. Un agente estatal que prestaba servicios de seguridad en el evento, detuvo al agresor.

ESTADOS UNIDOS.- Salman Rushdie, el novelista, recibió varias puñaladas en el cuello y el torso durante una conferencia en el estado de Nueva York; está conectado a un respirador artificial.

Después de varias horas en cirugía, Rushdie estaba conectado a un respirador artificial y no podía hablar.

Andrew Wylie, su agente literario, escribió en un correo electrónico, “Las noticias no son buenas, Salman probablemente perderá un ojo; los nervios de su brazo fueron cortados; y su hígado fue apuñalado y dañado”

A Rushdie, de 75 años, lo presentaban para dar una charla ante una audiencia de cientos de personas sobre la libertad artística en la Institución Chautauqua, en el oeste de Nueva York; cuando un hombre subió al escenario y se abalanzó sobre el novelista.

¿Por qué atacaron al escritor Salman Rushdie?

Los asistentes ayudaron a alejar al atacante, Rushdie cayó al suelo. Un agente estatal que prestaba servicios de seguridad en el evento, detuvo al agresor.

La policía identificó al hombre como Hadi Matar, un hombre de 24 años de Fairview, Nueva Jersey, que compró un boleto para el evento.

Un médico que se encontraba entre el público ayudó a atender a Rushdie mientras llegaban los servicios de emergencia, dijo la policía.

Henry Reese, moderador del evento, estaba junto a Rushdie, sufrió una herida en su rostro y ya fue dado de alta.

Amenazas de muerte

Rushdie, nació en el seno de una familia musulmana de Cachemira en Bombay, ahora Mumbai, y después se trasladó a Reino Unido, ha enfrentado durante mucho tiempo amenazas de muerte por su cuarta novela, “Los versos satánicos”.

Algunos musulmanes afirman que el libro contiene pasajes blasfemos. Tras su publicación en 1988, se prohibió en muchos países con población musulmana.

El ayatolá Ruhollah Jomeini, líder supremo de Irán, promulgó una fatua, o edicto religioso, llamando a los musulmanes a matar al novelista y a cualquier persona involucrada en la publicación del libro por blasfemia.

Rushdie se ocultó durante casi una década, consideraba su novela “bastante suave”. Hitoshi Igarashi, el traductor japonés de la novela, lo asesinaron en 1991.

El gobierno iraní dijo en 1998 que ya no respaldaba la fatua y Rushdie ha vivido de forma relativamente abierta en los últimos años.

Organizaciones iraníes, algunas afiliadas al gobierno, recaudaron una recompensa de millones de dólares, para el asesinato de Rushdie y el sucesor de Jomeini como líder supremo, el ayatolá Ali Jomenei, dijo en 2019 que la fatua era “irrevocable”.

La agencia de noticias semioficial iraní Fars y otros medios de comunicación donaron dinero en 2016 para subir la recompensa en 600.000 dólares. Fars calificó a Rushdie de apóstata que “insultó al profeta” en su noticia sobre el ataque del viernes.