Desamparo de la mujer en México

En 1993 fue asesinada, en Ciudad Juárez, la adolescente Alma Chavira Farel. Su muerte representó, simbólicamente, el comienzo de los feminicidios en el país. Después, en 2001, fueron encontrados en un campo algodonero, de esa ciudad, los cuerpos de tres mujeres jóvenes. 

A raíz del suceso, en 2009 la Corte Interamericana de Derechos Humanos emitió una sentencia que condenaba al Estado mexicano por la falta de medidas de protección a las víctimas, por la no prevención de tales crímenes, por la falta de respuesta de las autoridades ante la desaparición de las jóvenes y  por la falta de reparación adecuada. 

De nada sirvió el dictamen: a 14 años del primer feminicidio se ha incrementado de cuatro a siete el número de mujeres asesinas cada día. Por citar un ejemplo, sólo en el Estado de México han muerto, de forma violenta, alrededor de tres mil mujeres de 2006 a 2013. 

Motivos: impunidad y actitud machista de quienes gobiernan en México, tanto en el nivel judicial, como en el ejecutivo y legislativo. 

Así, por presión del PAN y con el apoyo del PRI, la Cámara de Diputados retiró de su discusión en el pleno el dictamen que regulaba el acceso de las mujeres violadas a los anticonceptivos de emergencia y al aborto. 

Además. Diego Cruz, uno de los cuatro jóvenes conocidos como los Porkys, acusados de violar a Daphne Fernández, fue absuelto por un juez federal que ordenó su liberación por no encontrar pruebas suficientes contra el imputado. 

El juez Anuar González señaló:

“Le tocó los senos, le metían sus manos debajo de la falda, y (Cruz Alonso) le introdujo sus dedos por debajo del calzón y se los introdujo en la vagina, pero no se observa una intención lasciva ni intención de copular”. 

Este juez ha sido suspendido, pero el mal está hecho y su resolución es un claro ejemplo del machismo y de la impunidad que impera en nuestra nación. Que tristeza. 

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Imagen Zacatecas – Elizabeth Sánchez Garay