¿Se te rompió el Niño Dios? Karla te lo deja como nuevo
Karla ha dedicado su vida a la creación y restauración de figuras a base de yeso.
FRESNILLO.- Por más de 7 años, Karla Moreno Rentería ha dedicado su vida a la creación y restauración de figuras a base de yeso, oficio que orgullosamente heredó de su madre.
Para Karla es importante esta actividad, pues más que ser una manera de trabajar honradamente, representa tener presente a su mamacita, Genoveva Rentería Elizalde, quien perdió la vida el año pasado.
Luego de que “mi madre se dedicó mucho tiempo a crear figuras con fomi, fue mi inspiración para trabajar con el yeso,” comentó la artista.
Uno de los mayores retos a los que se ha enfrentado es la restauración de imágenes, las que en su mayoría son religiosas y representan un trabajo muy cuidadoso y de calidad.
“Para las personas representan imágenes que les fueron heredadas o regaladas, por las que tienen un valor sentimental para ellos. Por ello, hay que ser cuidadoso.” Comentó Karla.
“Una de las primera imágenes que hicimos fue la restauración de un Niño Dios, que al principio fue un poco difícil; pero, conforme pase el tiempo se ha mejorado la manera de trabajar”, mencionó la fresnillense.
Un reto más, la contingencia
Antes de que todo se detuviera por el virus del mal, se realizaban pedidos para centros de mesas para las fiestas o hasta alcancías para eventos importantes como 3 años o hasta baby shower.
Sin embargo, con la pandemia todo cambio, aunque Karla se puso manos a la obra y ahora piensa en los pequeños que están en casa.
Lo anterior, porque ahora hace pedidos en paquetes de tres piezas que manda a los hogares, para que los chamacos hagan cosas productivas para su casa.
Los escuincles se pueden entretener pintando alcancías, porta llaves, macetas, figuras de sus personajes de caricatura favorito y hasta pintar al perro (es broma), entre otras cosas que ofrece Karla.
Para sus manos no hay imposibles
A decir de la fresnillense, el tiempo de creación varía según el clima, pues un factor del que depende el proceso de secado en cada figura, pues cuando hace frío es más tardado.
Aunque Karla está lista para cualquier reto, pues está consciente de que estas figuras se convierten en un agradable recuerdo para sus clientes, quienes se llevan las figuras hasta para un regalo.
El precio de cada pieza varía según el diseño o el retoque de la imagen que van desde placas pequeñas, alcancías, figuras infantiles o patitas hueveras.
Cabe destacar que para hacer este tipo de creaciones recibe el apoyo de su hijo de 5 años, a quien le enseña que el trabajo honrado y bien hecho tiene su recompensa.