De tripas, corazón; Toto y el amor por su oficio
Hace 19 años, Arturo Campos Morales, comenzó a desempeñarse en el oficio que más le gusta, la elaboración de tacos de tripitas.
ZACATECAS.- Hace 19 años, Arturo Campos Morales, comenzó a desempeñarse en el oficio que más le gusta, la elaboración de tacos de tripitas, ya que su padre, don Felipe Campos, es a lo que se ha dedicado durante tres décadas convirtiendo su negocio en un legado familiar.
“Toto”, como le conocen sus amigos y familiares, estudió la licenciatura en Historia y combinó esa actividad con el trabajo durante casi 20 años, tiempo en el que se ha entregado enteramente al negocio junto con su hermano Felipe.
Entre los dos han hecho de los Tacos Don Felipe, un referente en el mundo de las tripitas zacatecanas, y para ello han tenido que sacrificar tiempo y familia para que a los suyos no les falte nada.
Las tripitas y el gusto de salir adelante
Pero la satisfacción ha sido mucha, pues gracias a su trabajo es que Arturo formó una hermosa familia por la que vela; entre él y su esposa Lorena, hacen todo lo posible para que a su hija Daniela, de 5 años, nada le falte.
“La esencia de nuestro negocio se basa en la familia, el trabajo y el gusto por poder servir, junto al personal que lo hace posible, es una satisfacción sin precedentes. Ejemplo indiscutible de mis señores padres”, comentó Toto.
El buen sabor en un día de trabajo
Platicó que su día, cuando le toca limpiar la tripa, comienza a las 7:00 de la mañana y termina a las 1:00 de la tarde cuando el producto acaba de cocerse; cuando le toca partirla tiene que madrugar a las 3:00 de la mañana.
A la taquería llega a las 6:30 de la tarde para empezar a guisar las tripitas para que a las 7:00 en punto comience la venta, la cual se extiende hasta la medianoche.
Ellos están ubicados en las inmediaciones de la Dirección de Tránsito.
En ese lugar ya tienen 28 años, y fue su padre quien lo echó a andar para darles educación a sus hijos, quienes ahora son los responsables de la taquería que cierra solo siete días al año.
La mezcla de dos oficios
Arturo, dijo estar comprometido al 100% con su trabajo, y entre sus planes está poner algún día su propio negocio.
“Lo que más me gusta de mi trabajo es conocer personas día a día que llegan porque nos recomendaron. Ver a las personas que disfrutan nuestros tacos es nuestra mayor satisfacción” cometó Toto.
Asimismo, comentó que tiene una cuenta pendiente con la Historia, concretamente con la difusión, porque es una carrera a la que dedicó 4 años de su vida y que no está dispuesto a perder.
Ser taquero y difundir la Historia son los objetivos de Toto, quien trata de darle el mejor ejemplo a su niña, siempre teniendo en cuenta la cultura del trabajo.