Reclaman justicia en el Día de los Derechos Humanos

ZACATECAS.- En el marco del Día de los Derechos Humanos, algunas familias exigen justicia y que termine la impunidad, pues sus seres queridos han sufrido crímenes que no pueden ser olvidados.

El abuso sexual de una menor de cuatro años en el jardín de niños donde estudiaba, el robo de Edwin, un menor del que dieron la custodia a una pareja a pesar de que había una búsqueda por él, el feminicidio de Litzy Sarahí y la separación de su hijo de su familia materna; y el caso de Nancy, una mujer a quien le arrebataron la vida en su propio domicilio, son algunos de los crímenes que han sacudido a la sociedad.

Abuso sexual en un preescolar

Erika Montserrat Martínez, es la madre de una pequeña que fue abusada sexualmente en un preescolar de Sauceda de la Borda y su agresor sigue libre.

La menor, tiene daños en el riñón derivado de la penetración, “cuando va al baño orina sangre, la agresión la dañó emocional, psicológica y físicamente”, narró su madre.

Compartió que la pequeña de seis años ha declarado en repetidas ocasiones, en el Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (SEDIF) y en el Centro de Justicia para las Mujeres; sin embargo no ha servido de nada.

La niña reconoce al agresor y mediante dibujos señala los actos que la obligó a cometer, “una niña de cuatro años no se puede inventar eso, la obligó a qué le hiciera sexo oral”, mencionó Erika entre lágrimas.

Han pasado dos años desde que la violación ocurrió y apenas hace uno, en que la Secretaría de Educación destituyó al empleado y apoyó económicamente con los tratamientos de la menor, pero al pasar el tiempo abandonó a la víctima.

A pesar de que hay una orden de aprensión contra el imputado, sigue en completa libertad.

Robo del menor Edwin Zaid

Rocío García es la abuela materna de Edwin, un menor de un año y medio al que separaron de su madre y se dio en adopción de manera ilegal. El delegado de la Procuraduría de Protección a Niñas, Niños y Adolescentes en dicho municipio, Germán Lizalde, participó.

Edwin fue cuidado por su abuela Rocío desde su nacimiento, en Jerez, un día la madre solicitó llevárselo a Jalpa, en donde ella vive, una persona se llevó “prestado” al menor y la madre nunca lo volvió a ver.

Germán Lizalde, informó a la abuela que se entregó la guarda custodia a otra familia ya que ningún familiar respondió por el menor, lo que supone la falta de un adecuado procedimiento legal.

Los ahora adoptantes, están prófugos y la señora Rocío se convirtió en un número más de los casos de impunidad.

Feminicidio de Litzy Sarahí

Ya pasó más de un año desde que raptaron a Sarahí de 16 años y a su hijo de tan sólo 2 años, situación que terminó en tragedia pues asesinaron a la joven y al momento el agresor sigue libre.

El papá de la menor, Sergio Valdez de Luna, acusó al Fiscal General de Justicia del Estado, Francisco Murillo Ruiseco, por abandono de la investigación del feminicidio.

Además, se le entregó la custodia del niño al padre, con quien nunca convivió, “él no es apto para tenerlo a su cuidado, ya que está diagnosticado con enfermedad psicológica”, narró Sergio.

Desde entonces, la familia de Litzy, no ha tenido cercanía con su nieto ni algún indicio de que realmente se trabaje por la justicia del feminicidio.

Feminicidio de Nancy

Es el caso más reciente, sucedido en Ojocaliente, Nancy de 34 años fue apuñalada en repetidas ocasiones en su propio domicilio y frente a los ojos de su madre, el crimen habría sido cometido por su expareja.

Era madre de cuatro hijos que quedaron en abandono y soledad, el más grande de 14 años y el menor de sólo 3, compartió su hermana, Elsa Maldonado.

La mamá, quién presenció el feminicidio y también fue víctima del agresor, acudió a las instancias correspondientes para denunciar al presunto autor; sin embargo, esa investigación sigue sin resultados.

La hermana de la víctima, relató que aún la semana pasada la Fiscalía General de Justicia del Estado de Zacatecas, tenía pruebas intactas, como el teléfono de Nancy, el cual a más de un mes no han revisado.

Los asesinos y el violador de los casos anteriores siguen libres.