Poncho se gana la vida lavando vehículos

ZACATECAS.- Le traemos la historia de uno de los tantos zacatecanos que se ganan la vida a mucha honra, se trata de Alfonso quien lava transportes públicos y vehículos.

Alfonso Acevedo Nava trabaja lavando camiones del sistema de transporte sub urbano y vehículos.

Poncho, como le conocen sus amigos, es padre de familia pues tienen  dos hijos, Cristian de 8 años y Juan de 6 años.

Sus hijos se quedan al cuidado de su esposa Cristina mientras él sale a trabajar para que no le falte nada a su familia.

Viene desde Vetagrande

Es así como Poncho tiene que madrugar para trasladarse desde la comunidad de Lampotal en Vetagrande hasta la capital zacatecana.

El lugar donde trabaja es en la calle Nueva Celaya, frente a las instalaciones del Partido Revolucionario Institucional.

En este área se le puede solicitar un lavado de vehículo o camión pues siempre tiene una actitud servicial.

Su jornada laboral comienza a las 9 de la mañana cuando empiezan a llegar los primeros camiones y coches.

Lo que más me gusta de mi trabajo es “andar en chinga, que mi trabajo luzca y que mis clientes queden contentos con la lavada”, comentó Poncho quien tiene 30 años.

A eso de la 6 de la tarde termina con su trabajo y se regresa a su casa donde su familia siempre lo espera con una buena sonrisa.

Su pasión es el béisbol

Poncho trabaja de lunes a sábado, pues aprovecha el domingo para descansar y dedicarse por completo a sus hijos y a una de sus pasiones que es el béisbol.

Práctica este deporte desde hace varios años pues le ayuda a desestresarse de la jornada laboral de la semana aunque sea por un rato.

Poncho trata de darles el mejor ejemplo a sus hijos y lo hace con su trabajo de lavador, oficio del que se siente orgulloso y que tiene muchos años llevándolo a cabo.

Es así como Poncho se gana la vida, con un trabajo honrado que le da para sacar adelante a su familia que para él lo es todo.

Así que ya sabe, si ocupa darle mantenimiento a su vehículo, no dude en acudir con nuestro buen amigo Poncho, quien lo dejará reluciente y como nuevo.