Familias de comerciantes, las más afectadas

La suspensión de actividades escolares y la disminución de las jornadas laborales en las oficinas públicas, que inicia este viernes 20 de marzo y se extiende hasta el 20 de abril, por la pandemia del Covid-19, representa un duro golpe a la economía de comerciantes fijos y semi fijos.

Esta cuarentena la sufrirán especialmente aquellos que viven “al día” como la señora Socorro, quien desde hace 35 años se dedica a la venta de nopales, chocolate de metate y miel en la Plazuela Genaro Codina en el Centro Histórico de la capital.

Para doña Coco, el puesto que monta todos los días a las 8:00 de la mañana y en el que trabaja hasta las 5:00 de la tarde, es su única fuente de ingresos, ya que es viuda y no recibe ayuda de sus hijos.

“Si dejo de venir ¿qué voy a hacer?, a veces necesito para medicina, por que padezco de la tiroides, entonces siempre tengo que estar en tratamiento y ¿a quién le voy a pedir?”, expresó angustiada.

Comentó que hace unos días, personal del Ayuntamiento de Zacatecas, le notificó que, como medida preventiva, deberá suspender la venta de productos, pero no le dieron una fecha de cuando iniciará esta suspensión.

Además de doña Coco, otros 10 comerciantes semi fijos de la zona, se verán afectados por la suspensión de ventas.

A su vez, un promedio de ocho comerciantes de comida, ubicados frente al Campus UAZ Siglo XXI, ya sufren los estragos de la baja afluencia de estudiantes.

Briseida, quien desde hace 5 años se dedica a la venta de comida, dijo que de su trabajo dependen cuatro personas; sus dos hijos y su padre, un adulto mayor.

Explicó que al día necesita por lo menos 200 pesos para alimentar a su familia, ya que como madre soltera no tiene el apoyo de nadie más.

Es así como el Covid-19 afecta a las familias de comerciantes zacatecanos, quienes están a la espera de que alguna autoridad les dé solución o al menos les informen hasta cuando pueden ofertar sus productos.